Tragedia en la Maternidad

Pocas cosas ecuánimes hay para decir cuando uno se entera de noticias tan patéticas como esta:

"Fallecieron 6 recien nacidos en la Maternidad Concepción Palacios" (El Universal, Venezuela):

Seis recién nacidos fallecieron en la noche de ayer en la Maternidad Concepción Palacios y la causa habría sido la falta de atención médica, según señaló Giuseppe Mandolfo, vicepresidente de la Asociación Médica Venezolana.

"La muerte de estos recién nacidos fue una muerta anunciada porque hemos denunciado la crisis de la Maternidad y lo que se pretendió fueponer pañitos calientes en vez de solucionar la crisis", dijo Mandolfo.

Explicó que el problema es "muy complejo", debido a que no existe suficiente gente capacitada que trabaje en el centro de salud, además de la deteriorada estructura de la Maternidad.

Indicó que a pesar de las inversiones que la Alcaldía Mayor ha hecho no ha sido solucionado el problema, "se han gastado 400 millardos y no sabemos en qué".
"Consideramos que la directiva ha sido negligente, deberían de renunciar si tienen un poquito de moral, porque no son capaces de llevar las funciones que se les asignaron", expresó.

Mandolfo aseguró que los médicos seguirán luchando para "rescatar la salud del pueblo y para brindar una atención digna a los pacientes". Por su parte Ligia González, jefe del servicio de enfermeras, dijo que esto es "la crisis dentro de la crisis y falta de atención adecuada".

La Maternidad Concepción Palacios es un emblema en Venezuela. Históricamente ha sido la principal referencia en lo que a la salud pública de madres y bebés se refiere. Pero también, ha sido el escenario donde la decadencia, la dejadez y la falta de políticas de salud pública han dejado huellas terribles.

No hay palabras para explicar la muerte de seis bebés. No valen declaraciones absurdas y llenas de cinismo como las del vicepresidente de la república. Este personaje ha dicho que no fueron seis los bebés muertos, sino apenas cuatro; ha dicho que los bebés venían muertos ya y que no fue por falta de atención médica; acusó al capitalismo y a España de "robarse" los médicos venezolanos.

¡Que plaga le ha caído a nuestro país con esta clase gobernante que no quiere ni un poquito a nuestro país! No es posible entender que estas tragedias pasen en un país al que le entra diariamente una absurda cantidad de dinero. Somos un país trágicamente rico, pero sólo somos ricos en petróleo. Lo demás, está convertido en una basura.

Nuestra tragedia es que el presidente, abrazado con Lula en Brasil, se siente ya en Mercosur. Como si esa vaina arreglara y dotara de medicamentos a los hospitales públicos.

Nuestra tragedia es que en Bolivia reclamen que no les ha llegado más del dinero prometido por el gobierno de Venezuela.

Nuestra tragedia es que Piedad Córdova se chulea al gobierno venezolano y lo declara públicamente.

Nuestra tragedia es que estamos más preocupados por el pajazo de Antonini en el caso del maletín; por los pajazos continuados provenientes de la "laptop de Pandora"; por el pajazo del diputado barinés y chavista Wilmer Azuaje contra la familia presidencial... el problema es que nuestros problemas no se parecen a los bebés; a los hospitales enfermos; a las epidemias; a la asombrosa cantidad de muertos semanales producto de la delincuencia... en fin, una tragedia de la que aún no hemos encontrado cómo salir.

Que Dios tenga un lugar en el cielo para los seis angelitos y los llene de bendiciones.