Buenos Aires (1)

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Caracas me despidió el pasado viernes en la tarde en medio del terrible y acostumbrado tráfico. En medio del estrés por llegar a la hora y de la posibilidad de alguna vía trancada -por lluvia, protestas, accidente, reparación interminable, etc.-, el aeropuerto se vuelve un oasis dentro del despelote capitalino.

Si bien Maiquetía no es el mejor aeropuerto del continente, resulta una posibilidad relativa de orden y buenos modales a los cuales no estamos tan acostumbrados los caraqueños. Bueno, lo de los buenos modales quizás es una exageración de mi parte. Pero parece. Para cualquier persona de otro país, sencillamente nuestro aeropuerto debe parecer un caos del cual provoca salir corriendo -o volando, para hacer el chiste fácil-.

En Maiquetía hay "seguridad". Por lo menos hay bastantes policías o funcionarios de cualquier índole que sugieren una sensación de seguridad. En Maiquetía, las personas no voltean para mirar quién camina a su lado o a un par de metros de distancia, tal es la sensación de esa seguridad difícil de definir.

Por fortuna, el avión salió a tiempo. Y la llegada también fue puntual. Agotadora pero puntual.

Buenos Aires me recibía casi al amanecer del sábado, en medio de un clima bastante frío.

Continuará...

Del tráfico y otras miserias capitalinas

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Caracas es una ciudad pensada para hace 60 años. De ahí en adelante, la ciudad pensada se convirtió poco a poco en la ciudad trancada.

De Norte a Sur. De Este a Oeste. Por arriba y por abajo. De día y de noche. Por el centro y por la periferia. Por las calles y por las vías (llamadas irónicamente) rápidas. Por la derecha o por la izquierda.

Trancada. Desesperadamente trancada por una salvaje jauría de metales y cauchos.

El tráfico debe ser declarado, URGENTEMENTE, un problema de SALUD PÚBLICA. No es broma. Tampoco ironía o humor ácido.

Violencia; furia; arrechera (descontento, para mis amigos latinoamericanos); impotencia; frustración; miedo; ganas de matar (en sentido figurado y a veces real); acidez estomacal; úlceras; dolor de cabeza; migrañas; ganas aguantadas de ir a un baño; hambre; deshidratación; tristeza; euforia (cuando se consigue avanzar diez metros); horas de trabajo perdidas; horas de familia o pareja perdidas.

Un coctel realmente explosivo. Un coctel individual pero también social. Volátil. Peligroso.

Es URGENTE. Las familias no pueden pasar cuatro horas o más en promedio metidos dentro de un carro, atrapados.

El tráfico; el transporte público; las vías; las leyes y la educación vial. Cinco ejes que hay que atacar, simultáneamente. YA.

Es es serio.

¡Qué pena con ese señor!

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La expresión es típica de mi país, cuando se siente pena ajena por la actuación de alguien contra otra persona. Se aplica también a las visitas... ¡que pena con la visita!

Una sensación similar tuve anoche al leer un escrito que se le atribuía al profesor Fernando Mires, filósofo y uno de los más profundos pensadores actuales de las ciencias políticas. Pero ante la crudeza y dureza del escrito, tuve mis dudas. La típica duda del que ya no quiere creer en nada y en nadie o del que intenta equilibrar la balanza. Hasta que hoy corroboré que, efectivamente, el escrito pertenece a Mires.

El autor de textos tan importantes como "La Rebelión Permanante"; "El Orden del Caos"; "La Revolución que Nadie Soñó"; "El Malestar en la Barbarie"; "El Islamismo"; "Civilidad. Teoría Política de la Postmodernidad"; "Al Borde del Abismo". Libro este último que habla directamente acerca del proyecto chavista y su impacto tanto en Venezuela como en América Latina.

Este es el relato de Fernando Mires:

El sábado 18 de octubre del 2008 fui detenido en el aeropuerto internacional de Caracas por un grupo de la Guardia Nacional venezolana en el corredor que conducía hacia la puerta del avión Lufthansa número 535 con destino a Frankfurt.

En ese lugar fui sometido a un largo interrogatorio mientras la tripulación del avión esperaba con impaciencia que dicho procedimiento llegara a su fin. Ya dentro del avión –donde la gente me miraba como si yo fuese otro Antonini– comencé a hacerme la pregunta que no quisieron contestarme los interrogadores. ¿Por qué a mí? ¿Por qué precisamente a mí? ¿Parezco acaso traficante de drogas? ¿O drogadicto? Más bien parezco –creo, y así me lo han dicho– lo que soy: un profesor jubilado de algo ya lento andar. ¿Por qué a mí entonces? ¿Por qué precisamente a mí? Todavía no logro encontrar respuesta a esa pregunta.

En la gran mayoría de los países donde se respetan los derechos humanos, ciertos pasajeros son interpelados por la policía (nunca por miembros de un ejército) a partir de indicios basados en determinadas informaciones. Pero yo ni siquiera –lo digo casi con ingenua vergüenza– he probado en una ya no corta vida un solo pito de marihuana, o no he mascado una hoja de coca por razones medicinales, como algunos adictos aconsejan, ¿por qué a mí entonces? Después de que el avión emprendió el vuelo recorrí los pasillos mirando, esta vez yo, a los pasajeros. De verdad, había entre ellos más de algún sospechoso de consumir algo raro. Pero todos pasaron el corredor sin problema. Entre los más sospechosos de consumir no sólo coca cola, había un grupo de europeos que en estado alucinado coreaban "¡jafez!", "¡jafez!", palabra que en español significa Chávez. Ya los había visto al entrar al aeropuerto chanceando con miembros de la Guardia Nacional, quienes reían junto con ellos. Probablemente venían de uno de esos encuentros multitudinarios que cada cierto tiempo organiza el Gobierno, siempre tan dadivoso. Yo, en cambio, viajaba solitario e invitado por ningún gobierno a pronunciar un discurso con ocasión del aniversario de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela.

Cierto es que yo no soy un simpatizante del gobierno de Chávez; y es mi derecho personal no serlo. Además, no encuentro –por más que quiera– ningún motivo para serlo. Pero tampoco soy un simpatizante de Bush y teniendo la visa en orden, he entrado y he salido de los EEUU cuantas veces he querido. Entonces ¿por qué a mí? ¿Por qué precisamente a mí? La verdad es que esta vez yo no tenía muchos deseos de viajar a Caracas. La expulsión del embajador de los EEUU –nación que financia el extraño "socialismo del siglo XXl" con sus compras de petróleo y con sus ventas de alimentos– más la expulsión del defensor chileno de los derechos humanos, el señor José Miguel Vivanco, no hacían presagiar buenos augurios para hacer visitas a Venezuela. Al fin decidí viajar por dos razones: la primera, porque mis queridos amigos de la UCV querían tenerme junto con ellos y de que yo hablara en el acto de aniversario. La segunda: porque ellos me pidieron explícitamente no hablar de política contingente. Y me atuve al acuerdo. Hice un discurso sobre el tema de "la libertad" basado en el pensamiento de Platón, San Pablo, San Agustín y Hannah Arendt, discurso que será impreso por la Facultad.

Nada de lo que hablé tenía que ver con la situación política venezolana. Entonces ¿por qué a mí? ¿Por qué precisamente a mí? Estuve, cierto, a punto de suspender mi visita a Venezuela como resultado de las denuncias de magnicidios lanzadas desde la Presidencia destinadas seguramente a crear un clima de hipertensión pública. Pensé que la situación podía volverse complicada y yo no tenía ningún deseo de líos inútiles; además, las autoridades estaban involucrando a honorables personas, incluso ancianos, y por si fuera poco, hasta un muerto. Pero mis amigos pronto me calmaron.

Las informaciones –según me dijeron– eran absolutamente falsas y provenían de un periódico dedicado a la pornografía política llamado La Hojilla. Además –me recordaron– ya son más de veinte las veces en que el Gobierno anuncia operaciones magnicidas y hasta ahora no hay un solo detenido, una sola persona, un solo nombre que haya pasado por los ecuánimes salones judiciales de la nación. El magnicidio –me dijeron– es un simple recurso electorero.

Pensé que después de todo mis amigos tenían razón y decidí a viajar. Comencé, sin embargo, a arrepentirme apenas llegué a Caracas y compré los periódicos.

Ahí me enteré de los problemas que han aquejado a distintas personas en el principal aeropuerto de la nación. Fotocopiar pasaportes de representantes de la oposición (nunca a los oficialistas) ya es normal. A un destacado sociólogo le fue simplemente arrebatado el pasaporte, quedando semanas sin documentación. En fin, como me dijo un periodista venezolano, aquí hay una maquinaria destinada a intimidar. Se trata de aplicar la política de la intimidación. Todavía no es implantado el terror como política oficial pero se trata de anunciarlo.

El ejemplo parte de la propia presidencia. El lenguaje del Presidente, que siempre fue procaz, hoy es ya terrorífico. Quienes en naciones normales disienten, son llamados por el magno, traidores y cobardes. Ganar elecciones significa: pulverizar a la oposición. Un personero de Gobierno, siguiendo el ejemplo que viene de arriba, anuncia que los opositores deben ser "quemados vivos". Los opositores, para el mandatario, no son personas equivocadas: son desgraciados e imbéciles. Creo que en ningún país del mundo el idioma político ha alcanzado tanta degeneración como ocurre hoy en el oficialismo militarista venezolano.

La política de la intimidación es practicada por las propias autoridades.

Parlamentarios comandan piquetes que eligen medios de comunicación como "objetivo militar", los que son apedreados como "acto de prevención". La idea es sólo una: aterrorizar, sembrar el miedo; en fin: intimidar.

Una muestra pequeña de la política de la intimidación pude observarla en el propio acto de aniversario académico donde tuve el honor de ser "orador de orden". Justo cuando el acto estaba por comenzar fue interrumpido violentamente por un pelotón de estudiantes oficialistas que rabiosamente entraron al recinto llenando las mesas de platos de comida. Protestaban en contra de la calidad del almuerzo que reciben gratis en la universidad. Miré el contenido de los platos. Más o menos lo mismo que se sirve en las universidades europeas, con la diferencia de que en Europa a los estudiantes les cuesta entre cuatro y cinco euros.

Pero dejemos de lado los gustos gastronómicos de los minoritarios estudiantes chavistas. Lo que resultaba evidente era que el objetivo del "operativo" no era la calidad de la comida sino simplemente interrumpir y violentar el acto académico. No traían ningún planteamiento que diera forma discursiva a la protesta. Sólo insultos y gritos en contra de la rectora de la universidad.

Pensé, inevitablemente, en mis tiempos estudiantiles. Quizás más de una vez me vi envuelto en tonterías parecidas. Pero, según recuerdo, tales métodos de lucha eran aplicados como último recurso y siempre con el objetivo de sumar fuerzas a nuestras causas. Para los estudiantes chavistas, en cambio, la violencia es el primer recurso. El objetivo no es ganar mayorías sino sembrar miedo, interrumpir y, si es posible, destruir. En fin, llevar a cabo la política de la intimidación que, por el momento, es la dominante en el país.

Cuánta razón tuvo Hannah Arendt cuando en su libro Violencia y Poder, escribió que la violencia nunca es ejercida por quienes son o luchan por la mayoría. Será y es, el recurso de grupos que no la tienen, o que temen perderla. De tal modo, que después de lo visto, a diferencia de otras ocasiones, deseaba abandonar lo más pronto posible Caracas. Pese a que había llovido mucho, el aire estaba denso, muy espeso.

Es difícil abandonar Caracas.

Para llegar al aeropuerto, donde hay que estar tres horas antes del vuelo, se requieren de horas adicionales para sortear las dificultades del tráfico que lleva a Maiquetía. Creo, además, que es uno de los aeropuertos peor organizados del mundo. Y por si fuera poco, está lleno de militares que vagan de modo anárquico a través de los pasillos, no sé bien con qué otro objetivo que no sea el de "sentar presencia".

La inspección no es rigurosa pero sí, muy lenta. Y por si fuera poco, hay que repetirla dos veces.

Pero qué importa: sacarse los zapatos dos veces con tal de salir pronto de ahí, otorga ánimo. Lo cierto es que después de la inspección, en cualquier aeropuerto tú te sientes al fin liberado para dedicarte, si quieres, a hacer tus compras. No así en el de Caracas.

Tú puedes ser objeto de acosos sorpresivos, como a mí me sucedió, justo en el momento de abordar el avión.

Al lado del avión había un grupo de militares, al parecer con el objetivo de re-inspeccionar a algún desafortunado pasajero que pasara cerca de ellos. Yo supe que iba ser objeto de esa irracional práctica aún antes de que ellos se acercaran a mí. Dos de ellos me vieron avanzar desde lejos como quien espera a un antiguo amigo. Dejaron pasar a mucha gente y esperaron que yo me acercara. ¿Su pasaporte? Aquí está. ¿Qué lo trajo a Venezuela? Una invitación de la Universidad. ¿Cuántos días estuvo? Aquí esta la hoja de entrada y salida. Cuántos, preguntó. Cuatro.

¿Dónde se hospedó? Respondo.

¿Qué lleva en el bolso de mano? Dos libros y un par de calcetines.

¿En qué trabaja? Soy profesor.

¿Cuánto dinero lleva? Cincuenta euros. Por mientras, otro militar repite cada cierto tiempo, como el cucú de un reloj: no se ponga nervioso, señor. ¿A qué universidad vino? A la UCV. Ahhhh, la UCV (lo dijo como si se tratara de un prostíbulo internacional). ¿Tiene invitación escrita? Si, aquí está. No está firmada. Me la enviaron por Internet, pero ahí está el número, llame de su celular. No respondió.

De pronto aparece una mujer con uniforme que se presenta como miembro de la comisión de drogas y comienza a recitar algo así como que las leyes son diferentes en cada país y mi deber es aceptar la situación, lo que he estado haciendo con infinita paciencia.

La mujer no da nunca la cara y mira siempre hacia abajo. Ella comienza ahora a preguntar. Su pasaporte. Aquí está. ¿Qué lo trajo a Venezuela? Etc. etc. Todas las preguntas fueron hechas por segunda vez. El militar sigue repitiendo como el cucú: no se ponga nervioso, señor. Otra vez me piden que me saque los zapatos. Otra vez inspeccionan mi maletín.

Después del rosario de preguntas, comenzaron de nuevo a hacerme las mismas interrogantes por tercera vez. Hace rato que no hay nadie en el pasillo. Un grupo de azafatas observa la escena con extrañeza, desde la puerta del avión.

Yo pido, ya muy cansado, justo cuando comienza la cuarta ronda con las mismas preguntas (el interrogatorio lleva más de media hora) que me dejen llamar por teléfono. La mujer mira hacia abajo y no responde. Le digo que si no me permiten hacerlo a mí, llamen ellos a la embajada alemana, o a la chilena, pues ahí saben quien yo soy.

La mujer mira hacia abajo y no responde. Sólo me dice que las leyes son diferentes en cada país.

La mujer que mira hacia abajo llama a los demás miembros del operativo y deliberan cuchicheando. Al fin, la mujer que mira hacia abajo me pregunta si estoy dispuesto a dejarme hacer un examen de orina. Yo ya estoy agotado y les digo, rendido, que me dejo examinar lo que ellos quieran si es que me permiten viajar. La mujer que mira hacia abajo llama a su gente y cuchichean de nuevo.

De pronto, aparte de un militar que está sentado en una silla, no hay nadie más en el corredor. El grupo del operativo ha desaparecido repentinamente sin dar una sola explicación. El militar sentado, me hace un gesto para que entre al avión. Busco mi maletín. Yace abierto, lejos de mí; los calcetines y mis anteojos de lectura, en el suelo. Ordeno mis cosas y entro al avión. Me duele mucho la cabeza.

Sin lugar a dudas, es una vergüenza mayúscula. Y una muestra más de la ignorancia y la intolerancia en la que estamos sumergidos.

La barbarie, estimado profesor, nos alcanzó y no nos dimos cuenta.

¡Así dijeron!

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"... Uno de los planes que hemos descubierto hace poquito, poquito, es que andan tratando de que se alce aquí alguien en Nueva Esparta, un militar golpista, bueno si llega a hacerlo, lo barreríamos de todos modos también...

... Cada vez que vengo me tengo que cuidar mucho porque los adecos me quieren matar. Aquí han construido su nido de serpientes, vengo consciente de los riesgos que corro, porque ahí está la policía de Nueva Esparta infiltradas por narcotraficantes..."



¡Ahí viene el lobo magnicida otra vez!

¡Ahora es en Nueva Esparta donde lo quieren matar!

Tal parece que al presidente lo quieren matar en todos los rincones de Venezuela, ¿será por eso que cada vez que puede inventa una gira y se larga del país a los mismos países de siempre?

¿Qué cosa tan terrible hemos hecho los venezolanos para merecer semejante castigo de tener un presidente tan cobarde que ve magnicidas donde quiera que vaya?

Así estamos.

Tronos del mundo

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Hoy publicó en Daily Mail (UK) un reportaje acerca de los baños con mejores vista del mundo, según un libro publicado: Loo With A View, de Luke Barclay.

Dice el artículo que hay que tomarse en serio el tema, pues según la "World Toilet Organisation" (algo así como la Asociación Mundial de Baños), los humanos nos pasamos un promedio de TRES AÑOS sentados allí. ¿Qué tal?

Aquí, los baños con mejor vista según Barclay.

Tasman Glacier, Nueva Zelanda:
Mount Sinai, Egipto:
Torre de guardias, Alcatraz:
Salar de Uyuni, Bolivia:
Mumin Papa Cafe, Japón:

Boston Bay High Camp, Washington:
Canton de Chelly, Arizona:
Valle de la longevidad, Ecuador:
Cliff-Top Chateau, Francia:

¡Así dijeron!

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“... Estábamos llegando a Maiquetía, abordando el avión, cuando me informan que hubo una falla eléctrica grande, en 15 minutos se había detectado; no solo detectado la falla, en quince minutos había comenzado ya la recuperación de la parte del sistema que se cayó...

... Vamos a darle un aplauso a la corporación eléctrica —por acá esta el general Hipólito Izquierdo, presidente de la Corporación Eléctrica Venezolana— y a todos los trabajadores. Eso se llama eficiencia ante una falla eléctrica... habrá que investigar bien las causas, pero es importante que el país sepa que nosotros ni los domingos descansamos...”


Desafortunadamente para los venezolanos, este señor no descansa ni los domingos. Pero más allá, hay que tener la cara de piedra para "felicitarse" por la eficiencia ante la falla eléctrica de hoy, que dejó a una buena parte del país sin luz. Eso me recuerda la vez que pidió un aplauso al viaducto que se acababa de caer.

Chávez tiene la indecencia de comportarse como si fuese un recien llegado al gobierno, cuando la realidad es que su gobierno lleva una malograda década (la década perdida de Venezuela). Echa el cuento de cómo se enteró de la falla eléctrica como para generar credibilidad en su auditorio y como para deslastrarse de cualquier responsabilidad -yo no sabía, yo me enteré igual que los demás-. Igual que el cuento aquel cuando rescataron a Ingrid Betancourt, Chávez dijo que se enteró por un obrero colombiano que le pegó un grito mientras inspeccionaba unas obras.

Parece que no gobernara este país como un caporal de hacienda. Mientras el país se inunda por las lluvias y se llena de damnificados, él se desgañita insultando a los demás en cadena nacional. Mientras el país se detiene en medio del tercer apagón nacional en menos de seis meses, él se pasea con ¡Sean Penn!, en una clara demostración de que lo importante no es gobernar sino exhibirse impúdicamente y hablar toda la paja posible.

Así estamos.

Sin palabras

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Excremento, lenguaje y paz (artículo de Tulio Hernández)

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Excelente artículo de Tulio Hernández que me permito copiar de la edición de hoy de El Nacional. Concuerdo casi al 100% con todo lo que allí se escribe.

Excremento, lenguaje y paz

El presidente Hugo Chávez, lamentablemente para todos, disfruta mucho con la palabra “mierda”. Desde el 2 de diciembre de 2007, cuando sufrió su primera gran derrota electoral, la suele llevar a flor de labios y en momentos de ira la paladea gustoso para luego dispararla como un dardo envenenado contra todo aquello o aquellos que le disgustan. Que en el auditorio haya niños, niñas o adolescentes, no lo detiene.

Como sucede con todos los exabruptos del Presidente, sus exégetas tratan de justificarlo aduciendo que también García Márquez ha utilizado el término en sus novelas.

Cosa que es cierta. No sólo García Márquez. La buena literatura universal recurre a cualquier tipo de palabras, por más grotescas, amorales o de mal gusto que sean, para dar cuenta de la grandeza pero también de la miseria de la experiencia humana.

Y es un hecho que la mayoría de las sociedades, salvo las excesivamente pacatas o totalitarias, respetan este recurso toda vez que la lectura de una novela es un acto de elección individual y de ejecución generalmente en solitario. En cambio, no sucede así con la palabra hablada. Todos los colectivos humanos, incluyendo los pueblos ágrafos, tienen un repertorio de términos, palabras y giros idiomáticos que sólo se utilizan en el habla coloquial ya que el grupo las considera groserías; es decir, para atenernos al DRAE, “descortesías”, “faltas grandes de respeto”, “tosquedades”, “rusticidades” e “ignorancia”.

Son palabras y frases -no voy a ofrecer una lista, pero el lector sabe a cuáles me refiero- que escritas pueden hacer parte de un buen discurso literario, pero usadas en actos públicos resultan agresivas, descorteses, impertinentes y de mal gusto. Por eso los padres tratan de prohibir su uso a los niños, y aunque no es una norma escrita, se hallan proscritas del habla pública, especialmente en boca de sacerdotes, maestros, medios de comunicación y, sobre todo, de las autoridades gubernamentales, quienes se supone son modeladores de los valores y la buena educación necesaria para la convivencia.

Una cosa es una adolescente caraqueña reclamándole a una de sus compañeritas de curso en uno de los pasillos del liceo: “Mariiica, ¡párame bolas!”. Y otra, muy diferente, si la misma expresión la utilizara frente a las cámaras de televisión, por ejemplo, una ministra en una rueda de prensa llamando la atención de una periodista entretenida con su vecina de asiento.

Lo mismo vale para García Márquez. Una cosa es que en su novela Aureliano Buendía pronuncie la palabra “mierda”, y otra, ¡Dios nos libre!, que el autor la incluya en su discurso de aceptación del Premio Nobel para, por ejemplo, adjetivar la situación actual de América Latina.

El discurso del Presidente comenzó siendo pugnaz. Luego derivó en soez. Pero en el presente ha entrado en una desencajada etapa que podríamos calificar de “rebuscadamente escatológica”. El uso de términos como “imbécil” para referirse a un opositor, o “desgraciado” para dirigirse a otro, van superando aceleradamente los límites del respeto que ya había roto cuando injuriaba sin freno a la jerarquía católica, los presidentes de otros países o los dueños de medios privados. Pero estos abusos del Presidente no pueden interpretarse como una anécdota más o un problema estético. De buena o mala educación.

Su revolcarse en la palabra sucia, el escarnio infeliz, la descalificación extrema y la fetidez idiomática que lo abate cuando se deja apresar por la ira es -básicamente, no hay que dudarlo- un problema político. Además de una perversión del lenguaje, constituyen un impedimento para la convivencia democrática.

No hay paz ni diálogo si el jefe del Estado oficia diariamente una guerra simbólica desde la oscuridad de su garganta. Hay que recordarlo, el uso de la palabra no es inocente. Ni inocuo. Lo sabían bien aquellos que escribieron: “En el principio fue el verbo”. Lo ratificó siglos después Wittgenstein al decir: “Los límites de mi mundo son los límites de mi lenguaje”. Eugenio Montejo, antes de despedirse alertó: “La primera acción de un gobierno despótico es atacar el lenguaje.

Y la primera defensa, del lado de la lucidez, debe ser el idioma”. Pero nada lo resume mejor, por la pícara ambigüedad que oculta la frase, que el desplante popular que dice: “Su palabra vaya delante y su boca sea la medida”.

¡Sonríe pa´la foto!

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"... por ahí andan diciendo que yo visto de rojo a todo el mundo para confundir a los francotiradores que me quieren magnicidiar... "




"... no vale!... que el presidente nos pateó??? de dónde sacaste eso??... lo que pasa es que nos insulta por puro cariño, para que sepamos que él se preocupa por nosotros..."




"... mírenme bien la cara... yo soy un buen muchacho... los malucos son los del gobierno de Uribe, la oligarquía de Quito y los opositores de Guayaquil... de resto, en Ecuador somos todos felices..."




"... y quiero denunciar públicamente a Capriles Radonski por provocar al gobierno para que le abran otra vez el juicio por lo de la embajada de Cuba!!...




"... gracias muchachones del Tribunal Supremo de Justicia!!!... sigan así!!..."




"... sí chico, es contigo Hugo... no te me hagas el loco ni mandes a tus malandros a que me pongan bombas porque igualito vas a terminar con las patas pa´rriba..."

Derechos Humanos (III)

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Continuando con la recopilación de los artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (ONU), hoy corresponde ver los artículos 7, 8 y 9 (son 30 en total).

Los seis primeros están aquí:

http://15cajas.blogspot.com/2007/11/derechos-humanos.html
http://15cajas.blogspot.com/2008/01/derechos-humanos-ii.html

Artículo 7

Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación.



Artículo 8

Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley.



Artículo 9

Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.



Siempre es bueno recordar cuales son nuestros derechos.

La buena publicidad

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Algunas veces, la buena publicidad es casi brutalmente simple. Los mensajes más demoledores tienden a ser los más focalizados. Y funciona para todo, tanto para la publicidad como para cualquier tipo de comunicación humana.

Veamos este ejemplo de Lance Final (Brasil):



¡Así dijeron!

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"... Dicen que somos novios pero no somos, lamentablemente para mí ... Mis respetos para esta dama, compañera socialista... Estás muy bella, como siempre..."

Tanta melcocha socialista tiene un sólo nombre: Piedad, la senadora (y desayunadora y almorzadora, como le dicen por acá) de Colombia, quien de nuevo merodea por Caracas en un fulano "encuentro de intelectuales de izquierda".

No se por qué, pero el Chávez "galán-galón" (mitad galán y mitad...) nunca ha logrado convencer entre los venezolanos. Aquellos mitos que han intentado acercar la figura del caudillo a la del macho criollo llanero a caballo no le han quedado bien. Todas esas leyendas urbanas que han dejado deslizar alrededor de la figura del comandante parecen más fabulaciones que otra cosa. Una hija de José Vicente Rangel; Viviana Gibelli; Ruddy Rodríguez; Naomí Campbell; Cristina de Kirchner; Mary Pili Hernández y otras cuantas más son parte del imaginario fantasioso que ha rodeado a Chávez.

Como quien no quiere la cosa, Chávez deja deslizar esa perla íntima de Piedad (¿quién le preguntó?)... ¿será que en la desesperación de generar noticias a como de lugar el presidente venezolano nos sorprenderá con algún anuncio matrimonial o al menos un concubinato de Palacio?

Si la noticia del magnicidio no logró prender en la prensa golpista local, tal vez quieran llegar al lado chismoso de los venezolanos con un cuento de semejante baja factura.

Así estamos.

Bien Vinotinto!

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La selección venezolana de fútbol finalmente pudo volver a ganar en las eliminatorias para el Mundial de South Africa 2010.

Ayer en Puerto La Cruz, contra Ecuador, la Vinotinto pudo pasar el trago amargo de la derrota ante Brasil, al remontar un 0-1 en el marcador y encajarle tres goles a la tricolor ecuatoriana. Con ese triunfo, la situación de Venezuela en la clasificación dejó de ser precaria, aunque todavía falta mucho trabajo para tener esperanzas concretas.

Por el momento, bien por la Vinotinto!! Salud!!


Patadas para todos

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¿Patadas Para Todos? ¿Pupú Para Todos? ¿Paja Para Todos?

¿Qué le quedará mejor al remedo de partido político autodenominado "revolucionario" PPT?

¿Y qué decir del viejo Partido Comunista de Venezuela? ¿No les debería dar vergüenza ser insultados de esa manera tan canalla por uno de sus hijos pródigos? ¿O acaso Chávez no es un comunista como ellos?

El presidente está en crisis. No se controla. No puede mantener un mínimo de control cada vez que sube a un escenario. Cada vez se ve más empujado a actuar el papel que él mismo se ha otorgado. Cada vez se acerca más al abismo.

Cada vez que habla es incapaz de parar. Cada vez tiene menos controles internos y externos. Dice todo lo que pasa por su cabeza, sin que haya alguna alcabala que detenga el vendaval de agresión y violencia con que nos ha embadurnado los últimos meses.

Dicen algunos que es un tema principalmente electoral. Que el presidente está actuando el "show de las elecciones". Que cuando pasen las elecciones descansaremos de tanto insulto y tanto asalto al lenguaje y la decencia.

Pero no lo creo. ¿Acaso el presidente pudo cerrar el ciclo después del referendum del 2 de diciembre pasado? No. ¿Acaso el presidente pudo detenerse en algún momento de este año? Sólo tuvimos un mes o menos de sosiego entre tanta violencia verbal.
  • ¿Es que no recordamos al sudoroso y dopado presidente de la madrugada del 3 de diciembre reconociendo la victoria "pírrica" de la oposición y jurando que su propuesta de reforma iba de todas maneras?

  • ¿Es que no recordamos cuando vistió de "mierda" la victoria del NO? ¿No dijo que era una "victoria de mierda"?

  • ¿No enfiló los cañones luego contra Colombia por el tema de la operación de rescate de los rehénes de las FARC?

  • ¿No recordamos el show en la selva con Nestor Kirchner y con Oliver Stone de teloneros?

  • ¿No recordamos el show armado a expensas del niño Enmanuel?

  • ¿No recordamos, acaso, la pataleta del 31 de diciembre, a las 7 de la noche, cuando el presidente Chávez daba declaraciones contra Uribe por haber "torpedeado" el rescate humanitario?

  • ¿No recordamos su voz estentórea tronando en el Hemiciclo del Palacio Legislativo mientras exigía a Estados Unidos y a Europa no llamar más terroristas a los muchachos de las FARC?
El inventario llega hasta enero... pero todos sabemos que la cosa ha seguido, con el único paréntesis de la visita a nuestro país de Álvaro Uribe y el viaje de Chávez a España a visitar al Rey.

Las últimas semanas el presidente se ha distinguido por amenazar a diestra y siniestra. Que lo diga la oposición venezolana y la boliviana. Que lo digan las Fuerzas Armadas de Bolivia, cuyo Comandante fue insultado en reiteradas oportunidades. Que lo diga el ex- embajador de Estados Unidos en Venezuela, quien fue expulsado del país. Que lo diga el director de Human Right Watch, expulsado sin ningún tipo de consideración. Que lo digan Alberto Federico Ravell y Miguel Henrique Otero, a quienes les ha caído la culpa magnicida. Que lo digan Acosta Carlez; Manuitt; Manuel Rosales; Pablo Pérez.

¿Será que a ese señor le va a salir espuma por la boca algún día de estos? Por lo pronto, va directo y sin retorno a los brazos siempre largos y generosos de una blanca camisa de fuerza.

Pobres dirigentes del PPT y del Partido Comunista de Venezuela. ¿Es que no hay quien les diga a los del PPT que ellos son hijos bastardos de AD y COPEI? ¿Es que nadie le dice al PCV que de nada vale vender los viejos ideales por las sobras de un poder que nunca han disfrutado? ¿Quién les dice que la monstruosidad esa del PSUV no es más que aquel viejo "chiripero" que logró reunir Caldera después del golpe del 92?

Valdría la pena recordarles a esos tipos aquello de que es mejor morir de pie que vivir de rodillas.

Planeta verde

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Para comunicar, la simplicidad es indispensable. La página "Good´08. 50 x 70" es parte de un proyecto de comunicación en distintos temas álgidos: calentamiento global; derechos humanos; guerras; mortalidad infantil; entre otros.

Para el tema del calentamiento global, hicieron un concurso para plasmar gráficamente la preocupación por el tema.

Estos fueron algunos de los mejores trabajos:











Pregunta

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Es una pregunta retadora. Al menos a mí me hizo pensar muchísimo y finalmente me dije: "¡carajo! ¡qué cantidad de cosas me faltan por hacer!". Creo que nunca lo había pensado de manera tan directa.

Parece un buen ejercicio para uno focalizarse en las cosas importantes.

Una página web (http://beforeidieiwantto.org/) permite a cualquiera hacer pública su reflexión acerca de qué cosas se quieren hacer antes de morir. Transcribo algunas de las respuestas que me encontré en la página:

Before I die I want...
  • ... to learn to Scuba Dive.

  • ... to travel to India.

  • ... to have a baby.

  • ... ir a La Luna.

  • ... to travel across the country on my bike.

  • ... divertirme mucho.

  • ... to fall in love.

  • ... to be a mom.

  • ... to love and be loved.

  • ... to be an actress in a movie.

  • ... to know the hapinness.

  • ... to learn to live.

  • ... to marry someone.

  • ... to go the Kentucky Derby.

  • ... visit outer space.

  • ... to go to the top of the Eiffel Tower.

  • ... to drink more champagne.

y una que me pareció muy honesta (de una niña de no más de 7 años):
  • ... I want to be a princess!

Es una interesante forma de saber o concientizar qué cosas nos pueden motivar en nuestra vida. Por lo pronto, me sirvió para darme cuenta que son muchas cosas las que no he hecho y que tal vez es mejor dar prioridad a algunos proyectos.

Mundo verde

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Vale la pena darle un vistazo a estos comerciales. Los dos primeros, son parte de una campaña de IBM:




Y esta pieza es de Epuron. Me gusta mucho la simplicidad en la idea y la limpieza en la ejecución:

¡Sonríe pa´la foto!

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"... ay coño... siguen bajando los precios del petróleo..."




"... dónde eztán loz bichitoz ezoz que vamoz a quemad???..."




"... tú no sabes quién soy yo... yo soy la reencarnación del Samán de Güere en el que Bolívar descansó y se meó..."





"... Aló president... aló?? aló???? coño me trancó!!!..."




"... jajajaja, aquí sí hay fuelza!!!!!..."




"... qué pasó mi Rey??? una seriedad, una vaina... Miguel Henrique está con el dientero pelao!!!..."

País en caricaturas

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Hace 20 años

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  • País: Chile.

  • Situación: después de 15 años, el gobierno del dictador Augusto Pinochet se enfrenta a un plebiscito para decidir su permanencia.

  • Resultado: NO (56%); SÍ (44%)

Con este resultado, se decidió el final de la larga dictadura pinochetista y se abrió un espacio democrático en el sur del continente, que hoy es modelo para el resto de la América Latina.

Sin embargo, a lo lejos, resulta extraño que un gobierno de mano dura como el de Pinochet se decidiera a dejar en manos de sus ciudadanos el destino de todo su poder. Desconozco la Constitución de Chile para aquel entonces. Sólo se que, como cosa rara en gobiernos autoritarios, Pinochet se hizo aprobar una en 1980.

¿Se sentiría sobrado el gobierno de Pinochet? ¿No concebía la posibilidad de una derrota? ¿Exceso de confianza en la pasividad o apatía del pueblo chileno? ¿Exceso de confianza en sus fichas institucionales? ¿En las Fuerzas Armadas? ¿Fue engañado el presidente por su entorno en cuanto a las posibilidades de éxito? Quién sabe. Tal vez un poco de todo.

A la oposición, concentrada en el NO, se le atribuye una estupenda campaña que motivó a muchos chilenos, especialmente los jóvenes de entonces, quienes no conocían otro gobierno que el de Pinochet. Se usaron en la TV chilena las llamadas "franjas televisivas" para ambas opciones.

Algunos ejemplos de la "franja del NO":

Este anterior spot pareciera aplicar a algunos otros casos conocidos de gobiernos "extendidos". Veamos más ejemplos:





Este fue el segundo boletín informativo del Tribunal Calificador de Elecciones (el CNE chileno):


En el Palacio de La Moneda, después de tener la información con los cómputos, el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea de Chile, Fernando Matthei le dice a los periodistas: "Tengo bastante claro que ha ganado el No, pero estamos tranquilos". Fue el puntillazo definitivo para la dictadura.

Las declaraciones del General Matthei, fueron captadas por Radio Cooperativa a la 1.03 del 6 de octubre de 1988:


Y este spot, que ya lo he puesto en algún momento, es el del llamado "Himno del NO" (Chile, la alegría ya viene):


Sigue siendo un caso tremendo desde cualquier óptica que se estudie. Para Chile, fue el punto de quiebre. A partir de entonces, tal y como lo establecía la Constitución, Pinochet gobernó unos meses más, hasta 1989. A finales del 89, hubo elecciones libres ganadas por Patricio Alwyn.

De haber ganado la opción "SÍ", Pinochet hubiese gobernado hasta ¡1997! Sin embargo, el dictador tuvo el control sobre las Fuerzas Armadas después de 1988.

Chile se merecía un destino mejor, y finalmente lo alcanzó a partir de 1989. El año que el mundo cambió a lo que conocemos.

Cobardes (2)

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I

Los activistas de Derechos Humanos, Nicolás Alvarez y Daniel Mendoza, de la ONG Nueva Conciencia Nacional, fueron detenidos y trasladados a la sede de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM).

"... Según denunció la abogado y columnista de ND, Tamara Sujú, el motivo de la detención fue el haber llevado el artículo de opinión del Capitán Javier Nieto Quintero, donde criticaba el busto en honor de Marulanda, a la sede del CORE 5 de GN en Caracas, a petición de un general..."
Pues parece que se les soltaron los demonios hoy al gobierno. Eso quiere decir que, una vez más, están dispuestos a todo. Falta cerrar Globovisión. Detener a algún periodista opositor emblemático. Imputar a Leopoldo López/ Enrique Mendoza/ Yon Goicoechea/ Ricardo Sánchez. Atacar sedes de medios de comunicación. Sacar del camino a Ismael García y Marisabel Rodríguez. Expropiar Alimentos Polar/ General Motors/ Coca-Cola FEMSA. Promulgar, mediante decreto-ley, la reelección indefinida del presidente.

Y así. Hasta que detengamos la locura.

II

Este fue el artículo del Capitán Javier Nieto Quintero:

Un nuevo atentado contra la dignidad de la FAN

Si dentro del proceso acelerado, progresivo y sistemático de descomposición moral e Institucional de Venezuela se han asestados golpes certeros, humillantes y dolorosos hacia la conciencia, historia y dignidad de una organización del Estado, es hacia las Fuerzas Armadas Nacionales.

Hoy nuevamente avanza el régimen y se arrodillan los generales cuando el pueblo de venezolano y países vecinos – que vergüenza – observa preocupado y tal vez desconcertado como se rinde homenaje a la memoria de un personaje colombiano quien fue responsable, durante muchos años de asesinatos, masacres y secuestros a ciudadanos venezolanos y colombianos. Hoy en el barrio 23 de Enero de Caracas, se exhibe, con la anunencia de las autoridades venezolanas una estatua a Manuel Marulanda Velez.

¿Y donde está el homenaje a la memoria de nuestros soldados y Guardias Nacionales acribillados, por órdenes de “tiro fijo” en La Sierra de Perija, Cutufi o Cararabo del Meta? ¿Y dónde esta el respeto a la memoria de los ciudadanos secuestrados que han muerto o aún están secuestrados por las FARC? ¿Y dónde esta el homenaje y respeto a los familiares del secuestrado que ha recibido como fe de vida el dedo o la oreja de su hijo en cautiverio? ¿Y dónde quedan los miles de Tachirenses o Apureños que han tenido que abandonar la tierra por amenazas o cobro de vacuna? ………. ¿QUE PASA SEÑORES GENERALES, HASTA CUANDO TANTA INMORALIDAD?

Desde el exilio, con mis sentimientos e ideales revoloteando por las calles de Caracas y San Cristóbal, durante horas de angustia y preocupación por el futuro de mi tierra, no puedo dejar de pensar y recordar los cinco años de formación militar que recibí orgullosamente en la Escuela de Formación de oficiales de las Fuerzas Armadas de Cooperación (EFOFAC). Cuando veo estos actos públicos absolutamente contrarios a nuestra formación, recuerdo por ejemplo, ese primer trote del batallón de cadetes, a las cinco de la mañana, por compañías, con nuestros comandantes al frente de cada unidad, entonando “ ...un, dos, tres…. tres, dos, un ,guerrillero, si te veo, yo te mato, y la sangre , me la bebo……”

Hoy esos comandantes de compañía y pelotón, son los generales de división y brigada que están comandando unidades a nivel nacional y aplaudiendo por acción u omisión el busto a la memoria de “tiro fijo”. A pesar de que cualquier ciudadano puede pensar que para el joven cadete, este tipo de cantos militares, eran fuertes en su contenido, posterior al trote de todas las mañanas, una vez en el aula de clase, se nos enseñaba en las aulas de clase, las razones por las cuales, nuestro enemigo era la subversión y el narcotráfico, entonces se analizaban, las consecuencias militares, económicas, sociales, políticas y diplomáticas que para el Estado Venezolano tenia la subversión colombiana.

En la actualidad, parte del proceso “revolucionario”, se tratan de transponer los valores y principios, todos los regímenes de corte totalitario hacen lo mismo, se busca confundirnos. Es en ese momento donde debemos apelar a la razón, la verdad, la historia y la ley. Es en ese momento en donde debemos recordar, cada ciudadano, investido o no de autoridad, que estamos haciendo historia, que no se trata de estar a un lado u otro de balanza político partidista, que se trata de estar al lado de nuestra Patria, que es justo rendir homenaje a esa tierra noble y grande que se llama VENEZUELA y que hoy y antes ha sido maltratada por la ambición sin límites del hombre deshonesto.

“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehova, tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas”
Josue 1.9


Fuente: Noticiero Digital (Venezuela)

El Cáucaso en llamas

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Hoy es noticia nuevamente la región del Cáucaso, sacudida por la invasión de Rusia a Georgia por el control de Osetia del Sur hace casi dos meses.

Un atentado con carro bomba dejó un saldo de 9 muertos, entre ellos 7 militares rusos, y 8 heridos. Todo ocurrió en Osetia del Sur.

"... El presidente de Osetia del Sur, Eduard Kokóity, responsabilizó a Georgia del incidente y acusó a aquel país de practicar el "terrorismo de Estado". "No hay ninguna duda de que este acto terrorista ha sido cometido por los servicios secretos georgianos", dijo Kokóity a Interfax.

La explosión tuvo una potencia de cerca de 20 kilos de trotilo y, según el Ministerio de Defensa de Rusia, se trata de un "acto terrorista cuidadosamente preparado" con el fin de boicotear el plan Medvédev-Sarkozy...

Por su parte, el Ministerio del Interior de Georgia emitió un comunicado acusando a Rusia de organizar el acto terrorista como "una provocación para demorar la retirada de las tropas rusas de la zona de conflicto". Esta retirada debe concluir para el 10 de octubre y en los puestos de los antiguos pacificadores rusos se instalarán observadores de la UE que ya se encuentran sobre el terreno"

Fuente: El País (España)


Así lo vieron en Russia Today:

Cobardes

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I

cobarde.
(Del fr. couard).
1. adj. Pusilánime, sin valor ni espíritu. U. t. c. s.
2. adj. Hecho con cobardía.

Fuente: Diccionario de la Lengua Española, Vigésima segunda edición

II

Lo sucedido hoy con el general Raúl Isaías Baduel es un acto de cobardía que raya en la miseria humana.

No soy adepto del general Baduel, para nada. Me parece que a él le aplica perfectamente aquel dicho criollo "tarde piaste pajarito". Creo que, al igual que otros cuantos, es un "opositor tardío"

Nunca me ha gustado esa imagen bien estudiada de distancia enigmática, de quien oculta secretos perennes, de chamán uniformado o iluminado con corbata. Un Hermano Cocó de hablar pausado y maneras educadas. Quien siempre parece tener un fajo de ases debajo de la manga pero no termina de sacarlos.

Sin embargo, a pesar de todo, es innegable que Baduel jugó un papel casi decisivo el 2 de diciembre pasado, cuando el gobierno presionado por los militares se vió obligado a aceptar los resultados adversos a la reforma constitucional.

La forma cobarde en que el general Baduel fue arrestado y arrastrado a un carro, son un ejemplo claro de abuso, que no es más que una cobardía embadurnada del poder mal entendido. Al general lo maltrataron en su dignidad delante de su esposa e hijos.

Le aplicaron el mismo ácido que al general de división de la Guardia Nacional Alfonso Martínez; el mismo que a los habitantes de los campos petroleros (ex-trabajadores de PDVSA), a quienes desalojaron a la fuerza de sus casas hace cinco años.


III

¿Qué se busca? Lo de siempre. Llamar la atención. Desviar la atención. Y, muy importante, descabezar a lo que queda de oposición política. Tal vez con la mira puesta para el 23 de noviembre. Como para que nadie encabece ninguna protesta popular.

Los procesos mediáticos abiertos contra Miguel Henrique Otero (director de El Nacional) y Alberto Federico Ravell (director de Globovisión), apuntan en la misma dirección. Y no sería exagerado pensar que el asesinato del estudiante de la Universidad del Zulia ocurrido hace dos días, por acción u omisión, tenga en el aparato represivo del gobierno un responsable.

La provocación exagerada y burda del gobierno contra los periodistas, estudiantes y cualquier persona incómoda (aeropuerto, SENIAT), así como la acción contra PEPSI de Venezuela y Coca - Cola FEMSA, dan cuenta del grado al que hemos llegado.

Entonces, si preguntamos qué está buscando el gobierno, la única y verdadera respuesta es que está cazando una pelea y creando el caos. El caos es el único lodazal donde se mueve con destreza el militarismo autoritario que en mala hora nos gobierna.

La amenaza está montada. Los cobardes están envalentonados. Las gallinas están cantando como gallos.

Es hora de las definiciones.

Simpson 2008

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Hasta Homero Simpson tiene algo que decir sobre las elecciones presidenciales del próximo mes en Estados Unidos.

Así, en un capítulo de Los Simpsons que se transmitirá un par de días antes de las elecciones, se verá a Homero en pleno acto de votación. Esta será la escena:




Esta es la reseña que encontré en Infobae (Argentina):

Día de elecciones en Springfield, las oficinas de propaganda de Barack Obama y John McCain ya están cerradas, pero Abe Simpson continúa haciendo campaña con un cartel en el que se lee "Me sigue gustando Ike", apelativo por el que se conocía al presidente Eisenhower.

Homero, que quiere votar a "un presidente, gobernador o cualquiera que vaya a gastarse mi dinero en bibliotecas", entra en la cabina de voto para paralíticos -en el otro no cabe- y pulsa en el ordenador el recuadro del candidato demócrata.

"Un voto para McCain", dice la máquina de voto electrónico, que hace que Homer se desespere al grito de "¡No! ¡Es tiempo de cambio! ¡Quiero votar a Obama!".

Al Jean, productor ejecutivo de Los Simpson, dijo al diario estadounidense Orlando Sentinel que la escena no pretende ser una declaración de apoyo a Obama sino, más bien, "un comentario sobre las irregularidades del sistema de voto" en los EEUU, informó el diario El País...

Pero las cosas no terminan allí. El incorregible Homero está postulado como candidato a la presidencia de su país (http://www.presidentsimpson.com/), con Bart Simpson como vicepresidente.


¡Al Tío Simón!

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Caracas, la violenta

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Es muy triste escribir notas negativas sobre la ciudad que me vió nacer.


Pero las cosas hay que decirlas. Foreign Policy acaba de hacer una lista de las cinco ciudades más violentas del planeta. Caracas encabeza la lista.

Esto dice la nota de FP:

Population: 3.2 million
Murder rate: 130 per 100,000 residents (official)

What’s happening: The capital of Chávez country, Caracas has become far more dangerous in recent years than any South American city, even beating out the once notorious Bogotá. What’s worse, the city’s official homicide statistics likely fall short of the mark because they omit prison-related murders as well as deaths that the state never gets around to properly “categorizing.” The numbers also don’t count those who died while “resisting arrest,” suggesting that Caracas’s cops—already known for their brutality against student protesters—might be cooking the books. Many have pointed the finger at El Presidente, whose government has failed to tackle the country’s rising rates of violent crime. In fact, since Chávez took over in 1998, Venezuela’s official homicide rate has climbed 67 percent—mostly due to increased drug and gang violence. Ramón Rodríguez Chacín, who recently resigned as interior minister, claimed in July that homicide has dropped 27 percent since January—but experts say he’s just playing with numbers. As for Caracas, some speculate that its murder rate is closer to 160 per 100,000.


¡Que tristeza! Tenemos que hacer algo por Caracas. ¡Pero YA!

Octubre rojo

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El mes comienza frenético, lleno de malas noticias, como si fuese el prólogo de esta especie de recta final en que se nos ha convertido el país.


El asesinato, presuntamente a manos de sicarios, del estudiante y presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad del Zulia(LUZ), Julio Soto. El crímen se cometió en Maracaibo, mientras Julio Soto se trasladaba en carro con otros estudiantes.

Lo acribillaron. Una masacre. Aproximadamente 20 disparos lo impactaron. Un hecho inconcebible.

Pero también hubo heridos, uno de ellos de cierta gravedad. Julio era parte del partido social-cristiano COPEI.

Y aquí se desgañitan los diputados serviles y rastreros del gobierno anunciando el apocalipsis si le tocan un cabello a su presidente Chávez. Se les van los gallos gritando a los cuatro vientos que medio planeta quiere asesinar, "magnicidiar" a su pobrecito comandante. Pero ni por un momento se les pasa por la cabeza la verdadera matanza que está ocurriendo fuera del Palacio de Miraflores. Todos sabemos que se les aflojan las tripas de sólo pensar que su comandante no esté... pero tengan un poco de decencia.

El Movimiento Estudiantil se ha declarado en luto activo y ha programado reuniones extraordinarias para evaluar los acontecimientos. Pero ya es hora de hacer algo más... ojalá el Parlamento Estudiantil -del cual Julio formaba parte- despierte de su largo sueño y fije una posición clara sobre el brutal hecho.

Ya basta de pensar que todo se soluciona saliendo a votar el 23 de noviembre.

Mientras eso ocurre, también fue noticia:
  • Carlos Kauffman acusa a Jorge Rodríguez y a jefe de la Disip por el caso de la maleta llena de dinero.

  • La aprobación de la Ley de Ordenación Territorial, que reduce a nada las potestades de gobernadores y alcaldes.

  • Caracas es nombrada la ciudad más peligrosa del mundo.

  • Las FARC se ofrecen para la primera línea de combate cuando nos invada el imperio.

  • Continuación del plan intimidatorio contra periodistas en el aeropuerto internacional.

  • Los ex-trabajadores de Coca Cola FEMSA bloquearon por enésima vez la entrada a las oficinas en Caracas.
En fin, las malas noticias nunca se detienen. Mucho menos en un país gobernado por una mafia de delincuentes que no encuentra cómo desviar la atención del país y de la comunidad internacional hacia cualquier otra cosa que no sea su gestión.

Así estamos. Entrando en la última parte del año y en el punto más oscuro del túnel... como el mejor anuncio de un despertar que no se ve tan lejos como parece.

¡Así dijeron!

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"... Al pueblo venezolano le exhortamos a prepararse para la lucha antiimperialista. Y solamente la acción revolucionaria nos prepara para ese fin. Es necesario acompañar con el corazón pero también con práctica diaria a los líderes del proceso revolucionario, a quienes reiteramos nuestro gran respeto y admiración. Les aseguramos que - si fuese necesario - seremos los primeros en el frente de batalla. La visión marxista y bolivariana de nuestra fuerza, instituida y cimentada por el camarada Manuel así lo exige..."

Parte de un comunicado escrito por los "guerrilleros del bloque oriental de las FARC-EP" a los "camaradas de la Coordinadora Continental Bolivariana, capítulo Venezuela" como agradecimiento a la estupidez de andar levantándole estatuas al asesino Marulanda.

Estos delincuentes están ofreciéndose para estar de primeros en el "frente de batalla" cuando los gringos nos invadan. Y no sería ni mala idea, si es que aquel sueño húmedo revolucionario de la invasión gringa llegara a ocurrir... en realidad, habría que preguntarle a esta tropa desarticulada de malandros lo siguiente: si ustedes no pudieron proteger a su amado Marulanda ni a Raúl Reyes, si ni siquiera pudieron "negociar" a sus rehénes emblema, ¿cómo demonios se supone que van a defender a los "líderes del proceso revolucionario"?

Francamente...