La Navidad es una época que parece sacada de un libro de cuentos infantiles. De hecho, de no haber existido, seguramente Disney la hubiese inventado (y digo Disney y no los hermanos Grimm, Perrault o Andersen, porque Disney llevó a muchos de sus cuentos a otro nivel).
- Christian Andersen escribió cuentos como: El Traje Nuevo del Emperador; el Ave Fénix; el Patito Feo; la Sirenita, entre muchos otros.
- Hermanos Grimm: Hansel y Gretel; Blancanieves; Pulgarcito; Caperucita Roja; el Sastrecillo Valiente, entre otros.
- Perrault: Cenicienta; la Bella Durmiente; el Gato con Botas, entre otros.
El desfile de Navidad típico de Disney o Christmas Parade (que antes, en algún no muy lejano tiempo, era transmitido en vivo por algún canal local); las comiquitas con los personajes vestidos a la usanza navideña; las escenas con montañas y pinos nevados; las películas de Mickey o Pluto o Donald con historias melosas y canciones nostálgicas; en fin, todo un conjunto de símbolos que por años han formado parte de esta época.
No hay nada mejor que despertarse un 25 de diciembre y ver a Mickey o Donald en alguna aventura navideña. Como también es un clásico, siendo justos, ver a Snoopy y Charlie Brown o a Los Picapiedras. Definitivamente, la Navidad significa ser niños una y otra vez.
Un poco de esos clásicos:
¡Y es que la Navidad es un estado de ánimo!
Felicidades a todos.
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