El Cáucaso en llamas (5)

No es poco lo que se juega en el Cáucaso, allá donde la vieja Europa del Este y parte de Asia intentan cicatrizar heridas ancestrales a punta de bayonetas.

Como se ha venido comentando insistentemente, el Cáucaso es una región geopolítica estratégicamente vital para el mundo occidental. El petróleo y el gas natural son ejes fundamentales para entender la situación. Los retazos fantasmales de la ex-Unión Soviética todavía tienen poder de fuego.

Georgia y Osetia del Sur son una bisagra para armar el futuro de las relaciones de Estados Unidos, la Unión Europea y China con Rusia; Irán y Siria -países que forman el eje antiestadounidense junto a Venezuela-. A todas estas, faltaría entender la visión que tienen países como Alemania; Francia; Inglaterra; Canadá; India; Arabia Saudita e Israel; piezas importantísimas de cualquier estrategia a largo plazo.

Lo cierto del caso, es que Rusia pareciera estar jugando el peligroso juego del cansancio de Estados Unidos, la Unión Europea y la OTAN, de llevar todo hasta el límite para exasperar los ánimos y provocar respuestas de Occidente. Justo en el momento en que Estados Unidos está en plena campaña electoral, con dos candidatos que representan polos opuestos ideológicos y generacionales.

Hoy, Rusia suspendió su cooperación militar con la OTAN, organización que agrupa a 26 países (entre ellos, Estados Unidos; España; Alemania; Francia; Reino Unido; Canadá).

Según la BBC:

Rusia le comunicó oficialmente a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que suspenderá su cooperación militar con la alianza tras la crisis de ese país y Georgia por la región separatista georgiana de Osetia del Sur.

La decisión se produce luego de que, a través de un comunicado, la OTAN informara que las relaciones con Moscú no podían seguir con normalidad a menos que las tropas rusas se retiren totalmente de territorio georgiano.

Mientras tanto, Rusia informó que mantendrá sus tropas en una zona de seguridad en los alrededores de Osetia del Sur. La zona se extenderá varios kilómetros dentro del territorio georgiano. Rusia también planifica reforzar su fuerza en Osetia del Sur.

"Mañana se instalarán ochos puestos de control en la zona de seguridad en la que se desplegarán 500 soldados de las fuerzas de paz; no más que eso", anunció el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, según la agencia de noticias Reuters.

Por su parte, desde AnsaLatina leemos:

Israel advirtió hoy a Rusia que proveer armas a Siria constituirá un "error", tras un anuncio de Moscú en ese sentido que parece vinculado con la decisión de Tel Aviv de vender armamento a Georgia.

Moscú y Tel Aviv deben tener un interés común en evitar cualquier instancia de "desestabilización" en Medio Oriente, dijo hoy la canciller israelí, Tzipi Livni.

La ministra se pronunció tras el anuncio en Soci, en las costas del Mar del Negro, sobre la disposición de Moscú a vender armas a Damasco para fortalecer su "sistema defensivo".

Ojalá se solucione pronto el conflicto, pero no hace falta ser muy ducho en estos temas para entender que la solución será a largo plazo, con muchas instancias de negociación y con mucho en juego.

Algunos apuestan a una resurrección de la Guerra Fría. Creo que es peor que eso, el mundo no está listo para una Guerra Fría, pues los actores no son los mismos de hace 20 años cuando cayó el Muro de Berlín.

Estados Unidos ha visto debilitada su posición hegemónica mundial pero aún conserva la suficiente fuerza para asustar a cualquier rincón del planeta. Rusia, por su parte, acomplejada por la disolución de la Unión Soviética, intenta regresar al tablero mundial sin la suficiente fuerza como para hacer temblar al planeta, pero sí para amedrentar a muchos vecinos.

Así están las cosas en aquel lado del mundo.

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