Curiosidad olímpica

Roqaya Al-Gassra, nacida en Bahrein, demostró que no hace falta pequeños shorts y camisa ligera para correr a alta velocidad.

La atleta asiática se apegó a las leyes musulmanas vigentes en su país y corrió los 200 metros vestida con un singular modelo de “burka atlética”, que sólo dejaba a la vista su rostro, y cubriendo la totalidad de sus piernas y brazos, áreas tradicionalmente “destapadas” por las corredoras.

La prueba de velocidad se llevó a cabo en el Estadio Nacional de Beijing, en el marco de los Juegos Olímpicos 2008.

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