Batalla en las calles, 2

El guión macabro

Ya lo dijo el genio Albert Einstein hace un siglo: "Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo".

Con esto quiero perfilar cuál será la orientación de mis palabras sobre lo ocurrido hoy en la Avenida Libertador de Caracas, en medio de una contundente marcha de factores democráticos opositores al chavismo contra la aprobación de la ley orgánica de educación.

La convocatoria y la marcha fue rotunda. Miles de ciudadanos manifestaron su inconformidad a pesar de todos los "estira y encoge" ocurridos a última hora respecto a las limitaciones impuestas a la actividad opositora. De nuevo, los ciudadanos demostraron su rechazo (mejor aún, su repudio) al modo chavista de gobernar, ese modo de aplastar a quien no los quiere.

Ese es un dato para el gobierno: a pesar de las contradicciones -y ciertamente, mediocridad en algunos casos- de los líderes opositores, los ciudadanos salimos en masa a demostrar el repudio generalizado hacia el chavismo que corroe cada esquina, cada barrio y cada calle venezolana.

Pero no puedo pasar por alto que todos sabíamos ya lo que iba a ocurrir. Los acontecimientos están escritos, son parte de una especie de guión macabro tácito en el que los factores de oposición y del chavismo juegan su papel con increíble precisión. No quiero decir que la intención sea esa, pero da mucho qué pensar que no se hayan dado cuenta hasta ahora.

El guión macabro sigue más o menos los siguientes pasos:

  1. Arbitrariedad del chavismo (algún preso político, algún herido, alguna aprobación de ley, alguna confiscación, etcétera)
  2. Reacciones divididas de la oposición: Algunos convocan a un cacerolazo, una marcha y a referendum. Otros, a desobedecer.
  3. Se privilegia la marcha "para que el mundo vea cuántos somos y lo civilizados que somos" y "para que el gobierno sepa cuán bravos estamos".
  4. Algún "resteado" de la oposición anuncia que vamos a marchar hasta el cuarto donde duerme Chávez y que nadie va a pedir permiso porque ese es un derecho inalienable. Un derecho humano.
  5. Algún previsivo dice: "vamos a pedir permiso para cumplir las formalidades, no vaya a ser cosa que..."
  6. El gobierno dice: "casualmente nosotros haremos una marcha ese mismo día, en el mismo lugar... no podemos aprobar su ruta". La oposición se molesta.
  7. El gobierno aprieta la tuerca: "los vamos a dejar marchar... pero sólo llegarán a 60 cuadras del punto que habían dicho ustedes". Oposición echa chispas.
  8. Los factores de oposición se arrechan: "es un abuso que no vamos a admitir, de ninguna manera vamos a aceptar eso", declaran.
  9. El gobierno da una rueda de prensa advirtiendo cuál es la ruta aprobada.
  10. Algunos factores de la oposición se resignan: "en verdad no es importante hasta dónde marchemos, lo significativo es que le mostremos al mundo cuántos somos". Un canto parecido a la fábula de la zorra y las uvas.
  11. Los periodistas se inquietan: "pero van hasta el cuarto donde duerme Chávez o no?? el gobierno dice que pueden llegar a 60 cuadras del lugar".
  12. Los líderes de la oposición dicen: "vamos hasta donde nos lleve el corazón", "no importa lo que el gobierno diga, el pueblo es el que manda", "el cielo es el límite" y vainas así que nadie termina de comprender.
  13. Se militariza la ciudad y se ponen varios cercos y barreras de policías, guardias nacionales, fanáticos y otros encamisados rojos.
  14. Comienza la marcha de los factores de oposición, contundente y demoledora.
  15. La marcha llega a destino.
  16. No ha terminado de llegar la marcha y aprovechando cualquier confusión empiezan los disparos y las bombas lacrimógenas. Plomo y gas del bueno, le dicen desde el chavismo a eso.
  17. Comienza el circo de las televisoras chavistas a decir que "los oposicionistas violentos, enfurecidos y envenenados por Globovisión agreden salvajemente a los funcionarios policiales"
  18. Algún funcionario mediocre, llámese sargento del CORE- 37, cabo de la policía o cualquier otro, hace algún acto heroico revolucionario para ganar puntos con el jefazo y ¿quién sabe? algún reconocimiento en la próxima cadena.
  19. Los ciudadanos resisten las bombas lacrimógenas. Heridos y asfixiados.
  20. La marcha se repliega.
  21. Comienza la batalla de videos y fotos por TV e internet... hasta la próxima marcha para repudiar los hechos acaecidos en esta.

No quiero trivializar un hecho tan grave, pero ha pasado tantas veces que ya el asunto es estereotipado. No puede ser que nadie lo haya notado y mucho menos que no se pretenda hacer algo diferente.

Las opciones no son o me quedo pasmado sin hacer nada o salir a que nos maten en una marcha. No puede ser. De hecho, existen innumerables acciones de resistencia civil no violenta que se han hecho y probado en el mundo. Aquí, algunos sencillos ejemplos: http://bit.ly/1buRb.

¿Qué hay que hacer? Primero que nada, no repetir las mismas cosas pues vamos a obtener los mismos resultados. Marcha de la oposición será acorralada y amenazada hasta que haya violencia... para después hacerse las víctimas de la violencia fascista de la oposición.

Hagamos marchas, de acuerdo... pero cambiemos las estrategias. No hagamos sólo la ruta que nos obligan. Desacatemos la imposición de que sea por una calle la marcha.

Llenemos la ciudad de gente por todos lados. Obliguemos a las fuerzas represoras a dispersarse por la ciudad... o por las ciudades. Ocupemos edificios emblemáticos del gobierno por pocos minutos y luego seguimos hacia otro lado (están distribuidos por toda la ciudad).

No es fácil, pero tampoco podemos seguir con la misma estrategia. Hay que romper la estrategia de "Día D". Es decir, no todo se acaba en un día. La lucha no es de un sábado. Es de muchos sábados... y domingos, lunes, martes, etcétera.

La batalla no es indefinida, pero tampoco acaba en unas horas. Debemos cuidarnos de ese culto a la "olla de presión" que va a estallar en cualquier momento sin que nosotros empujemos a que ocurra.

Al grande y fuerte se le agota de muchas maneras. Ese es el camino. Creo.

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