Más de Honduras

La situación política en Honduras pareciera prolongarse en el tiempo. Parece que la "comunidad internacional" decidió correr la arruga hasta más adelante.


Del impulso guerrerista inicial de la OEA y de los países del ALBA, encabezados por el bocón presidente venezolano, que pretendía la salida por la fuerza del nuevo gobierno (sin importar los costos en vidas humanas, económicos ni de ningún tipo), pasando por las vergonzosas intromisiones de Venezuela y Nicaragua en Honduras (Venezuela impulsando un conflicto armado y Nicaragua prestando su territorio para esta barbaridad), de repente todo se ha quedado quieto.

Por momentos, pareciera que el nuevo gobierno de Micheletti se consolida en el poder, duélale a quien le duela. Incluso, ha iniciado desde la semana pasada una ofensiva diplomática para defender lo que cree correcto con su país: su gobierno le negó la entrada a Insulza, condicionó la misión de la OEA y hoy rompió relaciones diplomáticas con Argentina.

Por cierto, ¿qué dirán la OEA y la ONU de esa situación diplomática inédita que hay en Tegucigalpa con los embajadores de Venezuela y Argentina expulsados, pero que se niegan a salir del territorio?

Atrincherados allá en Tegucigalpa, rindiéndole culto al torpe Manuel Zelaya, le hacen un pobre favor a la integración latinoamericana, al pueblo de Honduras y a nuestros pueblos.

Mientras tanto, Zelaya se da la gran vida viajando por toda América Latina, con dólares prestados y avión prestado. Y supongo que con dignidad prestada también.

0 Comentarios para la Caja: