Protestas en Irán (9)

Tras una semana en la que el sismógrafo tuvo que mudarse a la América Central (Honduras), dados los acontecimientos que están ocurriendo a partir del golpe de Estado del domingo pasado, es bueno volver a Irán.

Recordamos que a partir de los resultados presumiblemente fraudulentos de las elecciones presidenciales, se desató una ola de protestas que mantuvo alerta al planeta entero, por la magnitud de las mismas, la crueldad de la represión y las previsibles consecuencias de una revuelta en uno de los países más convulsionados del Oriente Medio.

Las protestas en la calle continúan. Pero han disminuído su intensidad.

El lunes pasado, el "Consejo de Guardianes" confirmó el triunfo de Mahmud Ahmadineyad, por lo que internamente parece haberse puesto un candado legal a las demandas de los manifestantes iraníes. Pero eso no ha parado las protestas en Teherán y en otras partes del país. Las noches siguen siendo para las protestas con cánticos, gritos y llantos desgarradores.

Pero la contundencia de otros acontecimientos ha competido con la rebelión iraní. La sorpresiva muerte de Farrah Fawcett y Michael Jackson, sumado al golpe de Estado en Honduras, han competido en los espacios de los medios de comunicación y en el interés de muchas personas.

Este artículo de El País (España) dibuja muy bien la situación iraní y las reacciones desatadas en el llamado mundo civilizado: http://bit.ly/179sK8.

Da vergüenza saber que mientras hoy la flamante Unión Europea (UE) retiró a todos sus embajadores de Honduras, apenas hoy mismo "están considerando" retirarlos de Irán. En Irán hay decenas de muertos (quizás centenares), cientos de heridos y miles de arrestados, en una carnicería desatada desde hace tres semanas. En Honduras no ha pasado ni siquiera una semana del estallido de la crisis, y las mayores amenazas han venido de la boca del presidente de Venezuela.

Pero en fin, es importante seguir enterados de lo que ocurre en Irán. No hacerlo, es condenarlos al mismo padecimiento del cual nos hemos quejado los venezolanos durante los últimos diez años.